Arco 01: ¡Los Dragones también pueden ser lindos!
Autor: Dragomir Cristian Mădălin (thesylthorian.com)
Traductor: Danki – Corrector: Kuuhaku/Femme
100 Luck and the Dragon Tamer Skill!
Arco 01: ¡Los Dragones también pueden ser lindos!
Autor: Dragomir Cristian Mădălin (thesylthorian.com)
Traductor: Danki – Corrector: Kuuhaku
Capítulo 13: Sorpresa de Medianoche
Estaba mirando al león directamente a los ojos, o más bien al dragón… y un general para acabar.
«Hm…» él entrecerró sus ojos y frotó su barbilla.
Seryanna no estaba diciendo ninguna palabra. Parada en la parte de atrás de la sala, junto a la chimenea encendida, ella tenía sus brazos cruzados y sus ojos cerrados.
Después de que el viejo hombre obtuvo la confirmación de amigo saliendo en frente de sus ojos, caminamos a la sala de recepción más cercana. Era grande y lujoso. Una gran e intrincada alfombra tejida estaba extendida a todo lo largo del piso, un candelabro de cristal estaba en el techo, retratos del viejo hombre y de una mujer dragón desconocida, probablemente su esposa, llenaban las paredes. Las cortinas estaban hechas de satín rojo con ornamentos dorados en la parte inferior. Una chimenea estaba en el medio de la pared junto a la puerta. Era muy cercano a uno de esos cuartos vistos muy seguidos en películas donde nobles de todos los tipos tenían una reunión o un baile.
Debido a que el sol estaba a punto de ocultarse, las luces estaban prendidas. En lugar de lámparas de aceite, ellos tenían una pequeña Piedra Mágica que resplandecía con una tenue luz amarilla. En esa habitación, no había nadie además de mí, el viejo hombre y Seryanna. Los sirvientes estaban afuera, atendiendo sus propios asuntos y posiblemente preparando la cena.
«Así que… ¿realmente eres el amigo de mi nieta?»
Respondí tragando saliva «¿Sí?»
«Hm…» entrecerró sus ojos otra vez.
«¿Hay algo que esté mal con eso?»
«No.» Sacudió su cabeza. «Ella es una hermosa dragonesa, ¿no es así?»
«¿Sí?» dije mientras miraba a Seryanna, ella no estaba mostrando ninguna emoción.
«¿La amas?»
«Sí.» Respondí francamente, pero entonces mi mente se detuvo cuando me di cuenta de lo que acababa de decir. «Erm… ¡Como amigo! ¡Como amigo!» dije inmediatamente.
«¿Oho?» él sonrió.
Es muy temprano para ese tipo de emociones, ¡te lo digo! ¡Además, realmente no creo que yo sepa lo que significa estar enamorado en realidad! Quería replicarle.
Mirando de vuelta a la susodicha mujer dragón, ella ahora estaba mirándome. Debí haber pisado una mina.
«Te das cuenta de que eres un humano, ¿verdad?»
Tragué saliva y lo miré.
«¿Puedes decirlo?»
«He sido general por 50 años. He dirigido muchas batallas contra los de tu especie. He asesinado a muchos soldados humanos y destripado a muchos autodenominados caballeros.»
«Así que, ¿conoces bastante bien de anatomía humana?» respondí estúpidamente.
El dragón parpadeó sorprendido y frotó su barbilla.
«¿Acaso no temes a nuestra especie?»
Levanté una ceja y apuntando a Seryanna «¿Podría haberme hecho su amigo si lo hiciera?»
«¡Buen punto! ¡Mi nieta tiene un ojo agudo cuando se trata de gente buena, después de todo!» asintió satisfecho.
“Él… es diferente del resto.» Dijo la dragonesa desde el fondo del cuarto.
«Puedo decirlo. Tan pronto como acepté ser su amigo, ¡su magia y su aura recibieron un gran impulso!»
«Sí, tengo talentos de todo tipo…»
«Eso supongo, ¿pero lo que no puedo entender es CÓMO o más bien POR QUÉ tú no te comportas como todos los otros estúpidos e ignorantes humanos con los que me he encontrado hasta ahora?» preguntó sacudiendo su cabeza.
«¿Porque yo no soy estúpido e ignorante?» me defendí con una ceja levantada.
«Hm, presumiblemente.» Él asintió.
«Tengo el presentimiento de que hay algo que quiere preguntarme, pero no desea hacerlo porque usted no sabe cómo es que voy a reaccionar.»
Para mí era bastante obvio esperar algo así de él. Después de todo, él era un general que peleó en las guerras dracónicas contra los humanos y cualquier otra cosa, entonces ahí estaba yo, un hombre humano acompañando a su nieta de vuelta desde un bosque muy peligroso, empuñando una misteriosa habilidad, y sin mostrar las típicas reacciones de odio contra su especie. Incluso yo podría haber tenido una o dos preguntas. Por ejemplo: ¿Cómo fue que llegué aquí? ¿Quién me trajo aquí? ¿Dónde fue que nací? ¿Cómo obtuve este poder? ¿Cómo funcionaba? Y un montón de otras preguntas.
«En efecto, hay algo que quiero preguntarte.»
Miré a Seryanna una vez y luego de vuelta a este hombre.
¡Aquí va! Pensé.
«¿Has matado a dragones alguna vez antes?»
La pregunta era seria.
«Erm… ¿No?»
«¿Alguna vez has llegado a matar a un humano?»
«¿Los imaginarios cuentan?»
«No. Tienen que ser de carne y sangre, no un producto de tu imaginación o magia.» Él dejó dicho en claro, pero era tan serio como podía serlo.
«Nunca, señor.»
«Hm… ¿Has matado a CUALQUIER especie inteligente antes?» me preguntó de nuevo.
«He matado insectos, en su mayor parte cucarachas, pero no creo que se les considere inteligentes… aún.» Dije y entonces pensé Tal vez si fuera a arrojar una o dos armas nucleares, tal vez las cambie genéticamente y las envíe a Marte, pero de otro modo, lo dudo.
«Es muy difícil para mí el creerte. Pero venir aquí sin asesinar a alguien, tú debes ser un hombre muy, muy afortunado, o hay más sobre ti que lo que se ve a simple vista.»
O ambos… Es más como ambos. Comenté en mi mente.
«Abuelo, él es de confianza.» Seryanna soltó un voto por mí.
¡Gracias, mi diosa pelirroja! Tenía un pulgar arriba mental hacia ella.
«Si mi nieta lo dice, le creeré.»
¡Entonces hazlo desde el principio! ¿Qué pasa con este interrogatorio?
«¡Bueno, vamos a prepararnos para cenar! Oh, y antes de que se me olvide, chico, será mejor que no pienses en ir tras la cola de mi nieta. Ella podría traer vergüenza a nuestra familia si ella escoge a un humano como pareja, y más importante, no es posible.» Él me miró con ojos severos, y podía sentir al viejo general detrás de ellos.
Sus palabras eran bastante duras, incluso aunque yo no estuviera seguro de qué es lo que deparaba el futuro para mí, repentinamente diciéndome que Seryanna estaba fuera de los límites solo porque se veía como un gesto duro de hacer. Otra vez, esta era otra sociedad, una en la que los humanos eran vistos como enemigos, y yo era parte de esos dichosos humanos. Si no fuera por la presencia de la pelirroja, yo habría terminado como comida de dragón al momento en me presentara en frente de esos guardias en las puertas de la ciudad de Andrómeda.
De lo que yo creía y había visto hasta ahora, esa era la razón principal por la que no quería que fuera tras la cola de Seryanna como él había dicho, aunque, ella no tuviera una para empezar. No era posible desde el punto de vista de su sociedad y por el hecho de que él una vez fue un gran general en las guerras draconicas-humanas. Su enfermedad fue probablemente la razón por la que él se retiró también, de otra manera, él no se veía como el tipo de hombre que se sienta alrededor y hace de niñera de un pueblo en las montañas todo el día.
Otra vez, ¿no estaba él tomando las cosas demasiado lejos? Qué tipo de hombre podría incluso llegar a pensar que cada hombre que su hija o nieta conozca es actualmente un gran pervertido que solo quiere dormir con ella.
Prácticamente cualquier hombre en su sano juicio, incluso yo, pero ese no era el punto…
«Te llevaré a tu habitación.» Dijo Seryanna, que se acercó a mí después de que el viejo hombre se fuera.
«Muy bien.» Asentí y la seguí.
Caminamos hacia el ala izquierda de la mansión, pasamos un par de puertas y paramos en la penúltima de ahí. Ella la abrió con una pequeña llave de metal, y caminamos dentro. Una cosa para mencionarse acerca de las casas dracónicas, es que eran generalmente diseñadas para los usuales dragones antropomórficos para que se sientan en casa, lo que significaba que eran bastante altas y tenían puertas robustas y grandes.
La habitación en la que iba a dormir era espaciosa, tal vez tan grande como la sala del apartamento de mis padres allá en Rumania. La cama era una de tamaño rey, lo suficientemente buena para albergar a un draconiano antropomórfico adulto. Las fundas de almohadas y sabana caqui estaban decoradas con volantes y adornos amarillos y cosidos en diseños de hojas y flores. Había un escritorio café oscuro a la izquierda, y una pequeña mesa con dos sillas junto a la ventana. A mi izquierda, había un espejo puesto en un marco de madera ornamentado. Todo se veía hermoso y listo para aceptar a un noble en su abrazo, no a un sucio humano de aspecto pasante.
«¡Wow!» dije sorprendido.
«No es mucho, pero con esto es suficiente.» Seryanna dijo con un suspiro.
«¿Viene con un abrazo de tu parte?» le pregunté con una sonrisa.
Ella solamente suspiró y sacudió su cabeza.
«¿Dónde está el anillo?»
«Aquí. ¡Sano y salvo!» le dije, sacándolo de mi bolsillo y entregándoselo.
«¡Bien! Con esto, tal vez mi abuelo se deshaga de su enfermedad.»
Me quité de encima la mochila que estaba cargando y la puse junto a la cama.
«¿Qué es lo que vamos a hacer con el resto de las hierbas?»
«Vamos a llevarlas mañana con el herborista del pueblo. Y para lo otro, se los voy a entregar al curandero de mi abuelo, y el preparará la medicina requerida para él. Gracias a esos hongos que encontraste, puedo regresar este anillo y no preocuparme por dejar ir bandidos y ladrones la próxima vez que me encuentre con ellos.» Dijo con una mirada de alivio en sus ojos.
«Tu abuelo se pondrá mejor, ¡no te preocupes Seryanna! ¡Deseo que se recupere para bien!» le dije con una sonrisa.
«Gracias.» Ella respondió con una pequeña sonrisa.
«Voy a tener a una de las sirvientas para que te traigan ropas temporales, entonces serás bienvenido para cenar con nosotros.» Dijo eso y se volteó para irse.
«Gracias, Seryanna… me has ayudado mucho.»
La mujer dragón no respondió, pero sé que me escuchó.
Sin ella aquí, hice lo que cualquier persona normal haría en mi caso y miré mis estadísticas. Mi mandíbula casi se cae al piso cuando vi los valores.
[Nombre]: Alkelios Yatagai
[Especie]: Humano
[Nivel]: 63
[Fuerza]: 16+313.5+607.5
[Velocidad]: 14+247+452.5
[Destreza]: 20+251+527
[Magia]: 16+188.5+251
[Suerte]: 100
[Excelencia Mágica]: 1%+6.75%+8.5%
[Habilidades]: ¿Mostrar? S/N
[Puntos de Habilidad]: 2
[Puntos de Estadística]: 620
¿Por qué las acumulaciones? Pensé después de un momento, pero haciendo unas matemáticas rápidas, los resultados terminaron en estas estadísticas:
[Fuerza]: 937
[Velocidad]: 713.5
[Destreza]: 798
[Magia]: 455.5
[Suerte]: 100
[Excelencia Mágica]: 16.25%
Eran impresionantes, tenía que admitirlo, pero considerando el hecho de que el viejo hombre era un ex general, se sentía como si sus estadísticas fueran un poco bajas. Por el aspecto de las cosas, su fuerza era de 2430, mientras que su Magia era de aproximadamente 1004. Seryanna tenía la mitad de sus estadísticas, pero aun así, ella era un dragón sin despertar.
No lo sé, pero estaba algo… más de ex general del ejército draconiano. Era posible que sus estadísticas se vieran reducidas por causa de su enfermedad. Teóricamente, era posible.
Incluso así, obtuve un impulso bastante bueno y siempre y cuando él me considerara su amigo y yo a él, las estadísticas se mantendrán ahí. A este paso, estaba seguro de sobrepasar a Seryanna con la siguiente adición.
Pensando sobre ello, ¿tal vez había un método de acelerar este proceso?
«Hm… ¿Tal vez?» pensé y una sonrisa maliciosa apareció en mis labios.
Deseo que pueda encontrar amigos que incrementen el impulso de mis estadísticas en más de 1000 puntos en cada categoría. Volverme amigo de Kleo suena como una idea interesante también. Pensé y estiré mi espalda.
Con un deseo como ese, estaba realmente curioso de ver qué tipo de individuos iban a ir saliendo en mi camino. ¿Tal vez una sensual chica de senos grandes? No, mientras que Seryanna siguiera alrededor, no había necesidad de cambiar de objetivo.
«¿Y qué hago ahora?» me pregunté mientras miraba la cama y la bolsa en frente de mí.
No había ningún punto en sacar todas esas plantas ahora, así que era mejor simplemente esperar hasta que llegáramos con el herborista a día siguiente. Estaba un poco sucio y sudado, así que tal vez un baño podría ser una buena idea, sin embargo, no estaba muy seguro de cómo tomar uno aquí. ¿Acaso ellos tenían en realidad un baño en esta casa o cada quien tenía su propia cubeta pequeña?
Mientras estaba reflexionando sobre esto, decidí sentarme y tratar de mirar alrededor con mi hechizo.
«[Kitty Eyes]» dije y la habilidad se activó inmediatamente.
Mi percepción aumentó, y podía ver absolutamente todo alrededor mío. Como siempre, era una sensación extraña, pero era demasiado genial, no podía evitar el espiar a través de la mansión. La habilidad prácticamente abarcaba la mayor parte de ella.
Vamos a ver si puedo encontrar el cuarto de Seryanna… pensé mientras empezaba a revolotear alrededor.
Dado que no podía ver dentro de la mansión fuera de mi habitación, tuve que mirar a través de las ventanas. Las primeras habitaciones que comprobé fueron aquellas junto a la mía. Estaban vacías, pero tenían mueblería lujosa similar. El viejo hombre no estaba en ninguna de esas, así que me fui al segundo piso. El primer cuarto fue un fracaso, pero el segundo era el correcto.
La primera cosa que vi cuando miré a través de la ventana fue a Seryanna mirándose en un espejo. Ella no vestía su armadura, y yo podía ver perfectamente las escamas rojas en su espalda, recorriendo su espina dorsal, como una flecha apuntando a su redondo trasero. Tragué saliva y me acerqué a la ventana. Esta vez era de día, así que pude ver perfectamente la imagen desnuda de la diosa ante mí.
Repentinamente, ella se volteó y miró hacia la ventana. Me hice para atrás. Gotas de sudor se formaron en mi frente, pensando que tal vez ella me atrapó espiándola, ¿pero cómo podría ser eso posible? Yo era invisible. De cualquier modo, sin estar dispuesto a probar si ella podía o no verme, cancelé el hechizo.
De vuelta en mi cuarto, parpadeé sorprendido ante lo que vi.
«Wow…» pensé y entonces me di cuenta que mi bandera estaba levantada.
Esa mujer dragón realmente estaba llegando a mí… era casi como si el destino nos estuviera jalando juntos, o tal vez mis pensamientos de adolescente pervertido.
Un golpe en la puerta me despertó de mi trance, y me levanté de la cama.
«¡Ya voy!» dije y caminé para allá.
«Sus ropas, señor.» Dijo la pequeña dragonesa, pero cuando miró hacia abajo, sus mejillas se volvieron rojas, sus ojos se hicieron grandes, y ella inmediatamente se disculpó por mi vista.
«¿Huh?» parpadeé sorprendido y miré hacia abajo.
¡Argh! ¡La bandera de mi amigo está arriba!
«Oops…” dije y cerré la puerta lentamente.
Ahora estaba avergonzado.
Las ropas que recibí fueron un par de pantalones de seda, un par de zapatos, y una chaqueta de satín. Se veían delicadas y bastante caras, las puse abajo en la cama y miré a mis propias ropas.
«Realmente necesito una ducha…»
Después de que la bandera se bajó, puse un pie fuera de mi habitación y busqué por alguien que me indicara dónde estaba el baño. Un viejo sirviente me mostró el camino. Después de tomar mis prendas nuevas, caminé hacia allí, pero no sin antes hacer un deseo, así no accionaría el evento de ‘chica desnuda en el baño’. Ya tenía suficientes coincidencias por un día.
El baño era un poco frío, pero estaba sorprendido de ver que ellos tenían una versión rudimentaria de una regadera. Solo tenía que verter unas cuantas cubetas en la parte superior de un colector, y ya estaba listo para bañarme.
Cerca de una media hora después, caminé fuera de ahí cargando mis previas ropas sucias, que fueron llevadas lejos por una de las sirvientas, diciendo que iba a quemarlas.
¡No fui atacado por ningún zorrillo, sabes! Grite en mi mente, pero solo le mostré una sonrisa forzada en retorno.
«El maestro está esperándote en el comedor.» Me dijo antes de irse caminando lejos rápidamente.
Guiado por otra sirvienta, llegué a salvo al comedor, donde me fue mostrado mi asiento en una gran y larga mesa. El viejo general estaba ahí también, esperando pacientemente a su nieta para que se nos uniera. No intercambiamos ningún cumplido, y yo no tenía idea de las cosas educadas que se tenían que hacer o decir en estas situaciones, acorde a sus costumbres.
Incluso después de que Seryanna se nos uniera, simplemente comimos en silencio. Nadie preguntó nada, y nadie habló ni una sola palabra.
El menú consistía en estofado de pato, una carne de algún tipo y un huevo hervido como postre. No tenía idea de por qué algo como eso era el postre, pero después de que le di una mordida, mis papilas gustativas explotaron por la dulzura. No era una mentira decir que derramé lágrimas por causa de eso.
De cualquier manera, después de nuestra cena, el viejo hombre recibió una extraña mezcla roja y entonces se retiró por lo que quedaba de la noche.
Fui dejado con Seryanna en la habitación, pero luego ella se excusó también.
¿Debe estar cansada? Pensé mientras caminaba hacia mi habitación.
Con toda honestidad, yo estaba esperando un montón de otras preguntas sobre mi habilidad, tal vez el compartir viejos recuerdos. Ya sea fue algo que dije cuando llegué aquí, o todos ellos estaban cansados. Estaba esperando que fuera lo último porque no tengo idea de que fue lo que dije o hice para ofenderlos o incluso si ese era el caso.
Dejando salir un suspiro, decidí llamarlo una noche y apagar las luces en mi cuarto.
Quince minutos después, yo seguía mirando a la piedra mágica que emitía una luz amarilla.
«¿Cómo rayos trabaja esta cosa?» me pregunté a mí mismo.
No había ningún interruptor en la habitación, ni siquiera un manual de instrucciones escrito, nada. Con un suspiro, abrí la puerta y fui en busca de una sirvienta otra vez. La respuesta me fue dada de una manera cordial.
Cuando regresé, hice como me dijeron, lo cual era bastante simple: solo tenía que absorber la Energía Mágica en las piedras. No era muy difícil, y lo hice a la primera vez también, aunque, la sirvienta se rio cuando escuchó que yo no sabía apagar las luces. Creo que le debí haber dado la idea equivocada de cómo son de inteligentes los humanos en general. Seguro, yo no era el mejor de la caja, pero había algunos de nosotros en la Tierra quienes podían construir cosas increíbles como IA, robots, naves espaciales, computadoras, y más importante… inventar nuevas variedades de comida.
Me sentía cansado, así que cerré mis ojos y dejé que mi mente lentamente se maravillara en la tierra de los sueños. Había sido un día ocupado lleno con todo tipo de cosas nuevas para ver y experimentar, gente por conocer, cosas para aprender, cosas que comer.
Caer dormido fue fácil, y soñé con… honestamente, no recuerdo acerca de qué es lo que soñé, pero a medio camino, algo me despertó. Era un calor placentero alrededor de mi pecho. Me sentí bastante bien, como si alguien me estuviera abrazando, sin embargo, eso no podía ser posible porque yo estaba durmiendo solo, ¿cierto?
Abriendo mis ojos, vi que todavía seguía oscuro afuera. El sol aún tenía muchas horas antes de que tuviera que alzarse en el cielo otra vez, aun así algo estaba definitivamente fuera… Mis manos estaban alrededor de algo, o más bien de alguien.
¿Qué dem…? ¿Estoy soñando? Pensé mientras movía mis dedos un poco abajo.
Moviéndome para abajo por su espalda, por sobre la suave bata de seda, alcancé un área desigual. Mi cerebro no podía imaginar qué es lo que era, así que traté de obtener una mejor sensación de ello.
«¡Ahn~!» la tierna voz de Seryanna fue escuchada, e instantáneamente me congelé.
¿Qué? ¿Qué? ¿Qué? ¿Seryanna? ¿Ella está aquí? ¿En mi cama? Aquel a quien estoy sosteniendo es… y lo que toqué justo ahora, fueron sus… ¿escamas? Pensé, mientras me sonrojaba como idiota.
«Hace cosquillas…» dijo en su sueño.
«¿Huh?» me las arreglé para decir y entonces moví mis dedos una vez más.
¡¿Ese es su punto débil?! Dije en mi mente y entonces lentamente miré hacia abajo.
La mujer dragón tomó un boleto a la tierra de los sueños y no planeaba comprar el de regreso por el siguiente par de horas.
Tragué saliva y decidí tomar el mejor curso de acciones para esta oportunidad, mientras rezaba el no terminar como tostada la mañana siguiente. Mientras la sostenía suavemente en mi abrazo, jalé a la dragonesa cerca de mí. Ella se acurrucó conmigo, y creo que la vi sonreír. Sus piernas me bloquearon en esa posición, y fui dejado con la única opción de irme de vuelta a dormir, con la esperanza de que la bandera no se levantara… bueno, muy tarde para eso.
«Buenas noches, Seryanna…» le susurré.
¿Así que así es como es esto de dormir con una mujer en tus brazos? Se siente bien… pensé mientras me iba a dormir.
Referencias:
Este fue un nuevo capítulo de la WN, estoy seguro que haremos un pdf recopilatorio al final del Arco 01, así como en estos días una entrada recopilatoria donde se enumeren los capítulos ya publicados o algo similar y fácil de usar.